Un pesimista es una persona que tiene una perspectiva negativa de la vida y siempre espera resultados indeseables. El pesimista proverbial es el que piensa que el vaso está medio vacío en lugar de medio lleno. Un pesimista tiene una perspectiva sombría y cree que el mundo y las personas que lo rodean son malos. En algunos casos, la actitud pesimista continua conduce a la depresión y requiere medicación o terapia dependiendo de las causas subyacentes. El pesimismo es un rasgo que se puede mejorar, aunque se necesita tiempo y esfuerzo para convertir a un pesimista en optimista o al menos en realista. Las personas realistas tienen mucho más fácil ser personas efectivas. En lugar de centrarse en problemas que escapa a su alcance resolver, o ignorar los riesgos existentes, centran sus esfuerzos en su «zona de influencia», aprovechan al máximo sus recursos y prevén qué puede ir mal para estar preparadas. Ser realista es la actitud más inteligente. A fin de cuentas, si algo tiene solución, ¿p...